La herramienta permite conocer en tres dimensiones numerosas zonas del mundo. No obstante, también se ha utilizado para experimentos o estudios que en muchas ocasiones resultan ser rumores o hipótesis 

ALEJANDRO MÉNDEZ

Google Earth se ha convertido en una herramienta indispensable para aquellos usuarios que quieren ver en tres dimensiones una calle o avenida, conocer una ciudad desde el ordenador, o simplemente curiosidad por ver su propia casa vista satélite. Por tanto, la calidad informática de esta herramienta que ofrece Google a sus usuarios es indudable.

No obstante, desde su lanzamiento Google Earth ha estado rodeado de rumores que nunca se han llegado a confirmar. Estos curiosos rumores que se ha difundido por las redes sociales tratan de diversos temas, quizás unos más creíbles que otros.  

De esta forma, se pueden leer artículos que hablan de una mujer desaparecida y avistada con el programa gracias a una supuesta señal de socorro escrita en una playa (finalmente se descubrió que la playa estaba a pocos metros de una urbanización perdiendo así todo su sentido), o el descubrimiento de un ovni de color rosa identificado cerca del territorio americano de Montana tal y como relata un usuario en Youtube (Scott Waring).

Al margen de estas informaciones que muchas veces son difundidas sin contrastar, o basándose en hipótesis nada confirmadas, es cierto que con Google Earth se han podido desarrollar iniciativas positivas. Por ejemplo, el buscador realizó un estudio sobre una tribu de la etnia Suruí en la selva de Brasil con la finalidad de analizar su desarrollo y preservar su estilo de vida, luchando así contra la deforestación de su entorno natural.

En definitiva, Google Earth es un programa informático avanzado que permite el estudio y la experimentación del globo terrestre en diversos ámbitos, aunque en algunas ocasiones se difundan noticias más basadas en conjeturas que en informaciones veraces.